No es una utopía, en política también se puede perdonar. La pregunta es ¿Puedo perdonar? Si y puedo perdonar porque yo también recibí perdón, puedo amar porque yo también fui amado. Puedo dar aquello que he experimentado y es lo que ha expresado Erika Kirk. Aun con dolor y tristeza, y en medio del luto, ella pudo extender perdón.
Gracias, Erika, porque sabemos que Charlie tuvo a su lado, en vida, a una dama de hierro, aquella que se ha recostado en los brazos de Papá y ha aprendido la verdadera gracia. Perdonar no te hace débil ni mucho menos frágil. Al contrario, perdonar es para los fuertes, para los que mantienen la entereza aun en momentos críticos. Gracias, Charlie, por ofrendar tu vida por la verdad, has sido un gran líder, el cielo te ha recibido con los brazos abiertos.
Gracias, Erika, por extender gracia en un mundo que vive a la defensiva y a los gritos. Al final es lo que enseñan las escrituras, perdonar 70 veces 7. Intentaremos ir por ese camino.
By: Omar Sarmiento ( Nacidos para gobernar )