Un policía de civil mató de tres tiros a un ladrón que le robó la mochila y el celular
Otro episodio de inseguridad ocurrió el pasado jueves en el partido de La Matanza, cuando un efectivo de la Policía Federal Argentina (PFA) que volvía de su trabajo vestido de civil mató de al menos tres disparos a un hombre que intentó asaltarlo en la localidad bonaerense de González Catán.
Según informaron fuentes policiales, en horas de la mañana, el policía de 37 años regresaba a su casa cuando fue asaltado tras bajarse del colectivo. El delincuente lo amenazó con un arma de fuego y le robó el celular y la mochila, en el momento en el que el efectivo se encontraba en el cruce de las calles Coronel Conde y Don Luis Posamay, en esa localidad.
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Acto seguido, el agente se identificó y le disparó tres veces con su arma reglamentaria Bersa Thunder calibre .9 mm al asaltante, que cayó herido y falleció minutos después en el lugar, según consignó la agencia Télam, dado que recibió dos impactos de bala en el lado izquierdo del pecho y un tercero en el cuello.
De acuerdo con las fuentes, el asaltante, cuya identidad no se pudo determinar todavía debido a que no estaba documentado, tenía los objetos robados del policía. “Se está tratando de establecer los datos filiatorios del óbito, dejando constancia que el sujeto poseía el celular del efectivo entre sus prendas”, dijo un informante policial.
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Por su parte, un investigador afirmó a Clarín que el delincuente poseía un “tatuaje, el de los cinco puntos, como la cara de un dado”. “Es un tatuaje tumbero, de odio hacia la policía, seguramente de algún paso por la cárcel", agregó. Además, aseguró que el ladrón “estaba armado con un arma cargada” y que se va a determinar con pericias si “el arma funcionaba o no”.
En la causa, interviene el fiscal Gastón Dupláa de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza, que solicitó que se resguarde la escena del hecho para poder realizar los peritajes necesarios que determinen las circunstancias del hecho.
Asimismo, ordenó que el cuerpo del fallecido fuera trasladado a la morgue judicial para su identificación y autopsia. En relación al efectivo, el fiscal entiende hasta ahora que actuó en legítima defensa, por lo que no tomó ningún temperamento.