La docente Laura Virginia Radetich protagonizó escándalo  en un aula de la Escuela Secundaria Técnica Nº2 “María Eva Duarte” de Ciudad Evita, en donde buscó adoctrinar a un alumno que pensaba diferente a ella, ya que el alumno expresaba su concepto del gobierno de Alberto Fernández y defendía la gestión del expresidente Mauricio Macri. su rostro quedó en el centro de los principales portales de noticias de Argentina. Por estas horas, su cargo quedó suspendido y se constató que le iniciarán una investigación que podría derivar en un sumario educativo.

Radetich tiene 59 años y es licenciada en Historia. Se recibió en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires en 1989 y, entre su larga trayectoria como profesora de enseñanza media y superior, prevalece un proyecto de investigación que encabeza en el Ministerio de Educación y busca descubrir la representación de los profesores de Historia en la causa Malvinas. También posee un Magister en Nuevas Tecnologías que realizó en la Universidad de Salamanca (España).

El Gobierno tomó distancia de la docente K: “Nos oponemos a todo tipo de adoctrinamiento”.

El ministro de Educación Nicolás Trotta cuestionó a la profesora que le bajó línea a un estudiante por sus ideas políticas. Consideró que este tipo de situaciones “no se pueden permitir”.

El ministro aclaró que el gobierno bonaerense inició una investigación y separó a la docente, “mientras realiza todas las instancias de investigación presumarial”. A su vez, explicó que habló su par bonaerense Agustina Vila y destacó que se pusieron “en funcionamiento todos los mecanismos para garantizar que esos episodios no se reproduzcan en el sistema educativo”.

En declaraciones a radio Rivadavia, Trotta se mostró a favor de que haya “debates sobre la realidad social e histórica” en el aula, pero “no en los términos en los que se llevó adelante en ese video”. Planteó que “puede haber intercambios en la escuela secundaria y en el nivel superior, y es saludable hacerlo, pero en otras condiciones”. Aclaró que “el maestro, el profesor y la profesora no pueden imponer su perspectiva, sino respetar la mirada y la pluralidad, tratando de generar pensamiento crítico”.