Aparecen las primeras imágenes del hundimiento del Moskva mientras Rusia silencia qué pasó en el buque
Cuatro días después del hundimiento del buque ruso Moskva han salido a la luz las primeras fotos y vídeos del barco siniestrado. Rusia mantiene la versión de que el portamisiles se hundió debido a un incendio en medio de un fuerte temporal, Kiev reivindica el ataque y EEUU confirma que el buque de guerra fue alcanzado por dos misiles ucranianos.
El barco iba cargado con 16 misiles de crucero y otro tipo de munición. Parte del arsenal explotó en el buque, el resto, según fuentes del Pentágono, se encuentra ahora en el fondo del Mar Negro.
Las imágenes del Moskva humeante en medio del Mar Negro parecen tomadas desde un barco de rescate junto al buque. En ellas se ven graves daños en el lado izquierdo, un incendio y un espeso humo que se eleva desde el buque.
El Moskva se muestra inclinado hacia babor y parece que se han desplegado los botes salvavidas. No se ve tripulación a bordo. Se aprecia también que puede haber un barco de extinción de incendios ya que se ven chorros de agua que alcanzan el barco desde el lado opuesto a la toma de imágenes.
Aunque el Kremlin dice que no ha podido verificar las imágenes, analistas y expertos que han revisado las imágenes aseguran que parecen reales. El experto naval John Konrad ha publicado un hilo en Twitter en el que analiza las imágenes. Señala que en las fotos se ve que el barco ha perdido su línea de flotabilidad y "se está escorando hacia babor", que los botes salvavidas se desplegaron y que "el humo denso y oscuro es el resultado de la quema de combustibles pesados o materiales sintéticos" calificando la situación de "muy peligrosa".
“Creo que el video es real. Por lo que vemos, la forma, el tamaño. Es el Moskva”, dice a The Guardian Yörük Işık, periodista y experto en barcos que fotografía los buques de guerra rusos que viajan por el Bósforo.
OSINTtechnical, cuenta que comparte información de fuentes abiertas de inteligencia, las ha compartido en Twitter con un mensaje en el que señalan que aunque no han podido verificar su autenticidad, se trata de un buque de las mismas características: "No creo que ningún otro haya sido destruido de esta forma".
Las imágenes son consistentes con la versión de Defensa de Estados Unidos, que asegura que el portamisiles ruso se hundió tras recibir el impacto de dos misiles ucranianos en el lado que aparece muy dañado en las imágenes, tal y como afirma Kiev pero niega el Kremlin, que mantiene un apagón informativo sobre qué paso realmente en el Moskva.
Medios como el Wall Street Journal, el New York Times y la CNN citan a fuentes del Pentágono según las cuales los informes de la Inteligencia de EEUU indican que en el ataque se produjeron varios muertos entre la tripulación del Moskva y que botes salvavidas recogieron a los supervivientes. Sin embargo, Rusia sostiene que no hubo ninguna víctima mortal y que todos los tripulantes fueron rescatados del buque antes de que se hundiera mientras era remolcado a puerto. Ucrania dice que el capitán del barco, Anton Kuprin, murió en el ataque, pero esta información todavía no ha podido ser verificada.
Este sábado, el Ministerio de Defensa ruso publicaba un vídeo en el que asegura que se muestra a la tripulación del Moskva tras el hundimiento. En las imágenes se ve a un gran grupo de marineros en un desfile en la ciudad portuaria de Sebastopol, en Crimea, recibidos por el Comandante en Jefe de la Marina, el almirante Nikolay Yevmenov.
En el vídeo del ministerio ruso se ve a unos 200 tripulantes, aunque la tripulación del Moskva normalmente estaba formada unos 500 marineros. La primera parte de este vídeo fue difundida por el Kremlin sin sonido.
Nóvaya Gazeta, medio de investigación crítico con el Kremlin que cerró en Rusia y ha abierto una edición europea, ha recogido el testimonio de la madre de uno de los supervivientes del Moskva.
"La primera vez que supe de él fue el 15 de abril, dos días después del incidente", relata la mujer que narra que su hijo le contó llorando cómo el barco había sido alcanzado desde tierra, del lado ucraniano: "Me llamó y lloraba por lo que había visto. Fue horrible. Está claro que no todos sobrevivieron". La mujer añade que "murieron unas cuarenta personas, varios desaparecieron y hubo muchos heridos" y que desde el Ministerio de Defensa en Rusia impiden a los supervivientes regresar a casa para que no se filtre lo que pasó en el buque.
Además de este testimonio, Nóvaya Gazeta recopila informaciones que documentan la muerte de tripulantes, desde post en redes que lamentan el fallecimiento de jóvenes reclutas a una corona de flores en una ceremonia de despedida al Moskva en Sebastopol el 15 de abril con la inscripción "al barco y sus marineros".
La falta de datos oficiales sobre qué paso realmente esa noche en medio de la tormenta en el Moskva y qué ha sido de su tripulación ha levantado los primeros signos de incomodidad por parte de algunos comentaristas de los medios del Kremlin.
Vladimir Solovyev, presentador ruso normalmente alineado con la versión gubernamental, se mostró "indignado" por el hundimiento y lanzó una serie de preguntas retóricas sobre qué causó el siniestro, según recoge el New York Times.
"Si el barco se incendió antes de hundirse, como afirman los rusos, ¿por qué no tenía un sistema para extinguir el fuego? Si se hundió por dos misiles Neptune de fabricación ucraniana, ¿por qué carecía de un sistema antimisiles? (...) Explícame cómo se las arregló para perder el control”, preguntó Solovyev en su programa del sábado.
Esta intervención no es nada habitual en los medios en Rusia, que promulgó una ley a principios de marzo que castiga cualquier información que consideren "falsa" sobre la guerra. Los periodistas se enfrentan a cuantiosas multas y penas que pueden llegar a los 15 años de prisión, por lo que todos los medios independientes han echado el cierre en Rusia.
El NYT recoge que algunos comentaristas se muestran enojados en la televisión rusa por el hundimiento del Moskva y dan la espalda a la versión oficial de que todo fue culpa de un incendio. Vladimir Bortko, director de cine y exmiembro de la Duma, aseguraba el jueves en una tertulia que el ataque al buque de guerra debería tratarse como un ataque a la propia Rusia.
"El ataque a nuestro territorio es casus belli, una causa absoluta para la guerra de verdad”, dijo Bortko, que pidió respuestas contundentes, entre las que se encontraban bombardear Kiev y las redes de transporte que permitían las visitas de mandatarios extranjeros: "Bombardearlos de una vez y listo".
El Moskva era el buque insignia de la flota rusa del Mar Negro y su pérdida es la mayor catástrofe naval militar desde la Segunda Guerra Mundial.
Ha sido la principal baza por mar en las últimas contiendas militares de Rusia. Aunque a nivel militar no sea determinante en el curso de esta guerra y Rusia trata de minimizar su trascendencia, el hundimiento es un duro golpe para la imagen y la moral del Ejército ruso tras siete semanas de invasión.
A su vez, el hundimiento del buque supone una victoria para Ucrania y una inyección de moral para sus castigadas tropas del este que intentan mantener las posiciones defensivas.
Tras la catástrofe naval, Rusia ha intensificado sus ataques aéreos, incluidos lugares como Kiev de los que había anunciado su retirada.